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Las prácticas espiritistas y el tratamiento del alcoholismo

El alcoholismo en Puerto Rico se ha convertido en uno de los problemas de salud de mayor magnitud en Puerto Rico (Olavarría, 1989). En un estudio epidemiológico realizado por Canino & Bird (1987) se encontró que es muy probable que existan alrededor de 100,000 puertorriqueños con problemas de alcoholismo. Además de afectar la salud física y mental del individuo, el abuso del alcohol ha sido relacionado con el aumento de los divorcios, el abuso de niños, el maltrato de mujeres, accidentes automovilísticos y suicidios (Zayas, 1983).

Se ha argumentado que los programas terapéuticos que se han desarrollado para el tratamiento del alcoholismo en los puertorriqueños no han tenido la efectividad esperada debido a que no toman en consideración importantes variables culturales (Alcocer, 1982). Se ha señalado que la orientación de los programas de alcoholismo conflige con los valores y tradiciones de la cultura puertorriqueña (Gordon, 1981; Caste & Blodgett, 1979). Por ejemplo, el tratamiento para el puertorriqueño con problemas de alcoholismo que requiera que éste admita su dependencia al alcohol puede estar en conflicto con el valor machista de que hacer esto significa que uno es débil. Debido a esto existe una necesidad de desarrollar programas de tratamiento para el alcoholismo que sean relevantes al contexto cultural del puertorriqueño (Alcocer, 1982; Singer, 1984).

Reconociendo las limitaciones de los programas convencionales de ayuda para el tratamiento del alcoholismo y otros problemas de adicción, ha surgido un interés en estudiar el rol de las terapias folclóricas en el tratamiento de problemas de adicción a drogas (Spencer, Heggenhougen & Navaratnam, 1980). Trotter & Chavira (1978) han descrito las técnicas utilizadas por los curanderos mejicanos en el tratamiento del alcoholismo, sugiriendo la posibilidad de colaboración entre los sanadores folclóricos y el sistema profesional. Hall (1986) ha investigado el rol de las prácticas tradicionales de ayuda en la prevención y tratamiento de alcoholismo en los indios americanos. De la misma forma, Westermeyer (1980) describió los recursos folclóricos de ayuda utilizados por adictos a la heroína en Tailandia y Laos.

En Puerto Rico no se han realizado trabajos que intenten conocer el rol de las terapias folclóricas en el tratamiento del alcoholismo. Sin embargo, se ha encontrado que el puertorriqueño con problemas de alcoholismo generalmente busca ayuda fuera del sistema profesional terapéutico (Gordon, 1981). Específicamente se ha señalado que algunos puertorriqueños con problemas de alcoholismo acuden a sanadores espiritistas para recibir tratamiento (Garrison, 1977; Singer, 1984).

Considerando estos datos sería útil conocer más a fondo como los sanadores espiritistas definen, diagnostican y tratan los problemas de alcoholismo. Esta información podría ayudarnos en la modificación de programas convencionales con el objetivo de hacerlos más relevantes a los problemas específicos del alcohólico puertorriqueño. El modelo de tratamiento espiritista puede contener principios generales que faciliten el desarrollo de programas más efectivos y que estén en sintonía con la realidad cultural del pueblo puertorriqueño.

Metodología

La naturaleza de este estudio sugiere que la metodología de investigación cualitativa es la alternativa más apropiada para recoger y analizar los datos. Debido a que es muy poco lo que sabemos sobre las técnicas utilizadas por los sanadores espiritistas en el tratamiento del alcoholismo, esta investigación fue de carácter exploratorio y descriptivo. El principal interés no fue establecer relaciones causales ni tratar de probar la efectividad de esas técnicas. En este trabajo, adoptamos una orientación fenomenológica, esforzándonos por presentar la realidad tal y como nuestros participantes la describieron (Giorgi, 1985).

Se utilizaron dos métodos principales para obtener los datos: entrevistas y observación partícipe. Una muestra de 25 sanadores fue entrevistada utilizando preguntas abiertas en relación a su concepción, diagnóstico y tratamiento del alcoholismo. Se les pidió que ofrecieran ejemplos de casos de alcoholismo que hubieran tratado. También, se realizó observación partícipe durante tres meses en cinco centros espiritistas con el objetivo de conocer los procedimientos que utilizan los sanadores y el impacto que tienen éstos en los clientes. Estas observaciones contribuyeron a ampliar nuestra comprensión del espiritismo como sistema de ayuda.

Como investigador participé en las reuniones espiritistas en la medida en que se me pedía que participara. Mi rol fue explicado a los líderes de los grupos espiritistas y en todas las ocasiones me recibieron de manera muy positiva. Más aún, muchos de ellos se sintieron alagados de que la "ciencia tradicional" estuviera interesado en estudiar el espiritismo.

De los 25 sanadores entrevistados, quince son mujeres. El participante más joven tiene 26 años, mientras el mayor tiene 78 años. Los participantes varían también en relación a su preparación académica: 12 de ellos tienen menos de 9 años de escolaridad; 7 de ellos han completado entre 9 y 12 años de escolaridad y 6 de ellos tienen estudios universitarios.

Resultados

Diagnosis y etiología del alcoholismo:

La mayoría de los sanadores indicaron que para diagnosticar el alcoholismo se basaban en síntomas físicos y componentes emocionales y relacionados a la conducta. Entre los indicadores que sugieren problemas de alcoholismo, los sanadores señalaron los siguientes: aumento en la necesidad de ingerir alcohol; pobre alimentación; deterioro de la apariencia física; violencia; desajustes en el presupuesto; baja auto-estima; pobre rendimiento en el trabajo; relaciones familiares deterioradas y pérdida de control.

La forma más común que los sanadores utilizan para diagnosticar el alcoholismo es la videncia, es decir, tienden a recibir un mensaje del mundo espiritual que les indica que la persona es alcohólica.

De acuerdo a los sanadores espiritistas, existen tres causas principales del alcoholismo: materiales, espirituales y kármicas.

Las causas materiales son aquellas que están relacionadas a los aspectos psico-sociales de la vida del individuo. Entre las causas materiales mencionadas por los participantes se encuentran las siguientes: machismo, problemas familiares, desempleo, modelos en los medios de comunicación y en la sociedad que fomentan el tomar alcohol, no reconocen el alcohol como una droga, problemas matrimoniales, falta de autocontrol, frustraciones que tiene la persona, depresión, poca fuerza de voluntad, observar a personas significativas tomando licor y desengaños amorosos. Uno de los participantes hizo el siguiente comentario: "En los programas de televisión se presenta gente tomando y eso se registra en la mente subconsciente de los que ven el programa. Cuando tienen un problema deciden irse a tomar ron".

También, se considera una causa material cuando a la persona se le da a tomar un tipo de poción que ha sido preparada con la intención de que le induzca el deseo a tomar alcohol. Esta poción se conoce como una "toma". Los sanadores consideran que las "tomas" pueden causar en el individuo dependencia al alcohol.

Como se puede percibir, los sanadores espiritistas tienen un conocimiento de la problemática psico-social del individuo alcohólico y como veremos utilizan técnicas de carácter psicológico para tratar las causas materiales.

Las causas espirituales son aquellas en las que están envueltos seres del mundo espiritual. Se considera que aquellos espíritus ignorantes que fueron alcohólicos en su vida material pueden inducir a una persona a ingerir alcohol. Estos espíritus no saben que ya no pertenecen al mundo material y quieren satisfacer las necesidades que tenían cuando estaban vivos. Como señaló uno de los sanadores: "Hay casos de carácter espiritual en donde el espíritu llega primero con el vaso de ron y le da un olor tan fuerte al individuo que éste tiene que correr a darse un palo".

De acuerdo a los sanadores espiritistas, los espíritus pueden acercarse a un individuo por dos razones principales: por afinidad o porque se haya realizado un trabajo de brujería. Afinidad espiritual es la semejanza de ideas y pensamientos que existe entre el ser espiritual y la persona. Es por medio de esta afinidad que el espíritu puede manipular las acciones de un individuo.

El alcoholismo espiritual puede también ser causado por trabajos de brujería, es decir que un individuo con facultades espirituales puede comunicarse con un espíritu que fue alcohólico en su vida anterior para que convierta en alcohólico a un enemigo suyo.

Un tercer tipo de causa del alcoholismo es la de origen kármico. El alcoholismo kármico es aquel que tiene sus raíces en una vida pasada del individuo y es considerado como una deuda que éste tiene que pagar. Este tipo de alcoholismo es considerado el más difícil de tratar y varios de los participantes consideraron que en la mayoría de los casos es muy poco lo que se puede hacer. Por último, varios sanadores señalaron que algunos casos de alcoholismo podrían ser causados por una combinación de causas espirituales y materiales. Es decir, una causa material puede, con el paso del tiempo, atraer causas espirituales.

La etiología espiritista sobre el alcoholismo es sumamente compleja. Usando nuestro vocabulario psicológico podemos señalar que los sanadores espiritistas consideran que el alcoholismo puede ser causado por factores psicológicos, sociales, espirituales y fisiológicos.

Tratamiento espiritista para el alcoholismo

A continuación se describen los distintos métodos utilizados por los sanadores espiritistas para tratar el alcoholismo. Estos métodos pueden dividirse en las siguientes clasificaciones principales: técnicas psicológicas, terapia a base de plantas, pociones, rituales santeros, santigüos, oraciones y trabajo de causa.

Técnicas psicológicas utilizadas por los sanadores espiritistas

Los sanadores espiritistas utilizan técnicas psicológicas en el tratamiento del alcoholismo debido a que están conscientes de la importancia de las variables psicológicas en los casos de alcoholismo. Los sanadores consideran que en el tratamiento es importante la cooperación del alcohólico porque nada se puede hacer si éste no quiere superar su problema y consideran que la fuerza de voluntad tiene un rol muy importante en la recuperación del alcohólico. Un sanador declaró: "La fuerza de voluntad es como una persona más dentro de uno". Además señalan que el primer paso en el tratamiento de la persona alcohólica es establecer una relación de confianza con éste porque de acuerdo a los participantes, el alcohólico es una "persona muy sensible al cual hay que tratar con mano de seda, con mucha delicadeza porque si no es así, no vuelve".

De las entrevistas se desprende que en el tratamiento del alcoholismo los sanadores enfatizan la responsabilidad del paciente por su recuperación. La siguiente expresión recoge el sentir general del grupo que se entrevistó:

Le decimos a la persona que él es responsable de lo que está pasando. Nosotros podemos trabajar la causa pero si él sigue visitando la barra con su grupo de amigos, van a venir otros espíritus ignorantes. La persona tiene que dejar de beber y esa es su responsabilidad.

Los sanadores también manifestaron que para tratar efectivamente al alcohólico es necesario fomentar la participación

de la familia paras que la misma le ofrezca apoyo. Uno de los sanadores hizo el siguiente comentario:

Es importante que la familia se incluya en el tratamiento y le dé ánimo a la persona. Muchas veces la familia es responsable de que la persona se vuelva alcohólica. También, la familia puede perjudicar el tratamiento de la persona. Por ejemplo, en una ocasión estábamos tratando a una persona alcohólica y después de salir del templo la esposa le dijo: "Tú no estás bebiendo ahora pero deja que salgas para que tu veas como te vuelves a emborrachar."

En el proceso de orientación psicológica los sanadores utilizan las siguientes técnicas:

1. Le recomiendan a sus clientes que, si van a tomar alcohol, es mucho mejor que lo hagan en su casa y no en un bar.

2. Usualmente los sanadores utilizan el poder de la sugestión como una forma de hacer consciente al alcohólico de la seriedad de su condición. Por ejemplo, pueden decirle cosas tales como: "La sangre tuya se está convirtiendo en agua. Te puede dar cáncer en el hígado". Otro sanador señaló que le dice a sus clientes alcohólicos lo siguiente: "Si te quieres morir, sigue tomando, pero si quieres vivir un poco más deja de tomar."

Un sanador espiritista expresó que, como el tiene facultades extra-sensoriales, puede saber si el cliente alcohólico está dejando de tomar licor o si continúa utilizándolo. Esto hace que el cliente no se atreva a tomar licor por miedo a ser confrontado.

Otro sanador nos relató el siguiente caso en donde intervino sugiriendo una estrategia en la cual se utilizó el miedo:

La esposa de un hombre que estaba tomando licor de forma exagerada me consultó para que le orientara en relación a cómo podía ayudar a su esposo. Le recomendé que un día que su marido viniera borracho, esperara que se acostara en la cama y le pusiera una sustancia que asemeja a la sangre por toda su camisa para que el esposo pensara que estaba vomitando sangre. Ella lo hizo así y el marido se asustó tanto que no ha vuelto a tomar una gota de licor.

3. También los sanadores acostumbran a decirle a sus clientes que si no pueden dejar de tomar alcohol, reduzcan lentamente la cantidad que se toman lentamente hasta que puedan dejarlo completamente.

4. Otra técnica consiste en describirle al alcohólico la forma inadecuada en que se comporta cuando está embriagado para ver si de esta forma reacciona y cambia su conducta.

Resumiendo, el modelo psicológico espiritista para el tratamiento del alcoholismo se caracteriza por ser directivo, orientado al presente y dirigido a cambios conductuales concretos.

Plantas

Las plantas se utilizan frecuentemente en el tratamiento del alcoholismo por tres diferentes razones: para aliviar los efectos físicos que produce el alcoholismo; por sus efectos aversivos; y porque ayudan a tranquilizar al alcohólico.

Primeramente, los sanadores espiritistas utilizan algunas plantas para tratar los malestares físicos que produce el alcoholismo tales como enfermedades del hígado, úlceras y gastritis. Ellos informaron que el ingerir teces de las siguientes plantas alivia dichos males: espiga de trigo, matagallina, anamú, jengibre, malva, paletaria, naranjo, tilo, canela y semillas de lerenes y berros.

Segundo, los sanadores espiritistas también utilizan las plantas para producir efectos aversivos en la persona alcohólica. Estos creen que de las raíces y semillas de algunas plantas puede hacerse un té que cuando se tome antes de ingerir alcohol, o junto con éste, produzca en el alcohólico náuseas, dolor de estómago y vómitos. Se espera que el alcohólico asocie estos síntomas con el ingerir alcohol y desarrolle repugnancia hacia el alcohol. De acuerdo a los participantes de este estudio los siguientes teces pueden producir efectos aversivos: 1) té de las raíces de malva blanca, orégano chiquito, escoba amarga e higuillo; 2) té de la flor y mazorca del maíz, raíz de maguey, semilla de higüera, raíz fina de yuca, canela, pino y miel; 3) té de las semillas de calabaza, güiro, jagüa, pepino, melón, lechosa y uva playa.

Por último, los sanadores espiritistas pueden recetarle al alcohólico baños de plantas con el propósito de que éste se tranquilice y pueda envolverse de forma más efectiva en el tratamiento. Uno de los sanadores señaló que "el fluido que se desprende de las plantas se queda con la persona y le hace bien."

Recomendamos que futuras investigaciones exploren los componentes químicos de estas plantas para determinar si en realidad tienen los efectos que los sanadores les atribuyen.

Pociones

Para el tratamiento del alcoholismo los sanadores espiritistas también recetan una serie de pociones. Por ejemplo, pueden recomendar a las personas que cada vez que sientan deseos de tomar alcohol, lo sustituyan por jugo de limón espeso con miel de abejas. De esta forma la persona puede sustituir el ron por una bebida que no es dañina para su salud. Esto puede compararse a la recomendación que se le da a los fumadores de que sustituyan el cigarrillo por goma de mascar.

Otra poción consiste en sacarle el agua a un coco y llenarlo con licor, y a los cuarenta días mezclarlo con miel de abejas. Esta poción se le da a tomar a la persona alcohólica por tres días consecutivos, lo cual producirá malestar físico que será atribuido al ron.

Otra poción que los sanadores espiritistas utilizan por sus efectos aversivos se hace mezclando un poco de sangre del pez de anguila en una botella de ron. Cuando la persona toma de este ron experimenta vómitos y malestar estomacal. Se espera que piense que estos síntomas son producidos por tomar alcohol.

Para aquellos que ya tienen daño estomacal a consecuencia de la bebida, le recetan tomar el agua de una papa cruda rayada y teces de leche hervida con matagallina o ruda.

Rituales santeros

Los sanadores también utilizan rituales derivados de un sistema religioso afro-cubano llamado santería, el cual está tomando auge en la Isla (Sánchez, 1978).

Uno de los participantes nos dijo que dentro de los rituales santeros para tratar el alcoholismo se utiliza "la fuerza de San Expédito, Santa Edubije y Nuestra Señora de la Candelaria". De acuerdo a esta persona se le enciende un velón a cada uno de ellos y se entierra una palma joven en un envase. Este envase se llena de la mitad de ron y la mitad de arena. La persona alcohólica hace unas oraciones frente a este envase y pide que estos santos le ayuden a dejar su vicio.

Para usar la fuerza de San Expedito se le saca el agua a un coco y se llena de ron. Se le pone una mecha y se enciende haciendo una petición a San Expédito para que la persona deje la bebida.

Santiguos

Los santiguos se llevan a cabo dando masajes o sobos en el estómago de la persona utilizando aceite de oliva. Estos se emplean mayormente para "limpiar el estómago de los residuos que ha dejado el alcohol". Los sanadores creen que el alcohol deja como una especie de hollín en las paredes del estómago y es necesario eliminarlo por medio de los santiguos.

Oraciones

Los sanadores también le recomiendan a sus clientes que hagan una serie de oraciones varias veces al día. Estas oraciones se hacen con dos propósitos principales: tranquilizar al individuo y combatir la influencia de los espíritus ignorantes. Algunas de las oraciones que se recomiendan son "Plegaria del Náufrago", "Oración para cuando estamos enfermos" y "Acto de amor a Dios" (Kardec, 1978).

Trabajando la causa

Cuando la causa del alcoholismo es espiritual se procede entonces a "trabajar la causa". El espíritu que causa el problema es incorporado en el cuerpo de una persona con capacidades mediumnicas con el propósito de educarlo y convencerlo de que no siga induciendo a la persona a tomar alcohol. Algunos espiritistas usan velas y oraciones para ayudar al espíritu a alcanzar "luz y progreso". La mayoría de los participantes coincidieron en que el espíritu es llevado a "escuelas espirituales" para que obtenga mayor educación y ascienda de nivel espiritual.

Elementos terapéuticos de las prácticas espiritistas para tratar el alcoholismo

En esta sección analizaremos los elementos terapéuticos de las prácticas espiritistas basándonos en nuestro trabajo y en lo que se ha encontrado en la literatura relacionado a la efectividad del proceso de ayuda. A continuación se discute lo que, a mi entender, justifica que se estudie con más profundidad al espiritismo como terapia folclórica para el alcoholismo.

La reunión espiritista funciona como un tipo de terapia de grupo porque los participantes reconocen que comparten los mismos problemas y reciben apoyo del grupo (Delgado, 1987; Fisch, 1968). Los enfoques utilizados en el espiritismo para el tratamiento del alcoholismo son similares a la terapia familiar para alcohólicos (Singer, 1984). Por ejemplo, los sanadores espiritistas interpretan a la familia a través del modelo de causalidad circular, donde cada miembro afecta la conducta de los otros. En este sentido, el tratamiento está dirigido a la familia del alcohólico y no a éste. La familia siente que está colaborando en la sanación del alcohólico y disminuyen sus sentimientos de culpa. El cambio en actitud que se genera a consecuencia de esto resulta en un ambiente más propicio para la sanación del alcohólico.

Algunos sanadores espiritistas utilizan la terapia de modelaje demostrándole al alcohólico que ellos se sobrepusieron a la experiencia de dependencia al alcohol, o que, siendo una persona con sus mismas limitaciones, lleva una vida libre de drogas. De este modo le lleva el mensaje al alcohólico de que él también es capaz de hacer cambios en su personalidad.

En algunas ocasiones el sanador hace intervenciones drásticas re-estructurando las relaciones sociales del alcohólico y modificando los patrones de conducta que promueven y mantienen el alcoholismo. Por ejemplo, hacen todo lo posible para que el alcohólico no se reúna con amistades que lo estimulan a tomar alcohol.

El que en el espiritismo se recalque la dimensión espiritual y la relación con seres transpersonales puede facilitar la transformación del alcohólico. El rol de las experiencias transpersonales en la recuperación del alcohólico ha sido reconocido dentro del sistema de Alcohólicos Anónimos como uno de vital importancia (White, 1979). El espiritismo puede proveerle a la persona una visión de mundo que le brinde la fortaleza necesaria para liberarse de su adicción.

Por último, los sanadores utilizan la sugestión y métodos aversivos para ayudar al individuo a recuperarse. La sugestión puede explicar la efectividad de algunas técnicas espiritistas tales como el uso de plantas medicinales y rituales en donde se prepara agua para que se convierta en la medicina que la persona necesita.

Implicaciones de este estudio para el tratamiento del alcoholismo

¿Cuán efectivos son los métodos espiritistas para el tratamiento del alcoholismo? ¿Es posible integrar los principios del tratamiento espiritista para el alcoholismo en los programas convencionales? ¿Será útil que los profesionales de ayuda colaboren con los sanadores espiritistas en el tratamiento del alcoholismo? Para contestar estas preguntas necesitamos realizar más investigaciones que nos brinden luz sobre la efectividad de las terapias folclóricas en el tratamiento del alcoholismo. Las terapias folclóricas como sistemas de sanación que son culturalmente relevantes pueden ayudarnos a diseñar programas más efectivos para puertorriqueños que sufren problemas de alcoholismo. En vez de imponer servicios terapéuticos sin considerar los recursos de la comunidad, necesitamos apoyar y colaborar con los sistemas de sanación que están funcionando en la comunidad.

Consideramos que si los profesionales de ayuda adoptan una actitud de humildad es mucho lo que se puede aprender de los terapistas folclóricos. Este trabajo tuvo como propósito principal dar un paso en esa dirección.

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