En estos días he estado reflexionando sobre la necesidad de que en los congresos educativos 2.0 se sienta de forma directa y fuertemente la participación de los estudiantes. Los estudiantes deben tener un espacio no solo como asistentes a estas actividades pero también como recursos y conferenciantes en los mismos. Entiendo que el espíritu de la web 2.0 se basa en la filosofía de la participación y la colaboración. Mientras solo sean los llamados expertos y aquellos que han adquirido un grado profesional los que puedan presentar en los Congresos estaremos replicando los modelos tradicionales.
Y el reto no es que organicemos congresos en donde los estudiantes sean la figura central pues eso sería mantener la división estudiante-profesor. El reto es que se integren a nuestras actividades de tal manera que no sientan que ellos son los estudiantes y nosotros los docentes. Debemos invitarlos a formar parte de todas las tareas asociadas a a la actividad: promoción, diseño de carteles, ofrecimiento de talles y charlas, entre otras cosas. Debemos de manera genuina comenzar a aprender de nuestros estudiantes ya que de esa manera será mucho más fácil lograr la transformación educativa que anhelamos.
Volver a escuchar a esta estudiante manifestar su pasión sobre los blogs en el Congreso de Blogfesores 2007 me reafirma la necesidad de hacerlos partícipes de nuestros encuentros:
Ya los profesores hemos hablado bastante. Ahora hay que darle espacio y voz a los estudiantes en nuestras actividades educativas. Es tiempo de menos conferencias y más desconferencias.
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