No es fácil bloguear en tiempos de crisis social. No hace mucho sentido continuar hablando de blogs, wikis, podcast, rss, etc, cuando es muy probable que desde el lunes se implementará una orden ejecutiva mediante la cual cerraran las escuelas y un gran número de agencias del gobierno. Como consecuencia miles de personas tendrán que sobrevivir mediante un cheque de desempleo de $130 . La razón es que no tenemos fondos disponibles para pagar los sueldos de estos empleados. Estamos hablando de un país que está al borde de la bancarrota.
No hay que ser economista para entender que a este estado no se llega en dos o tres años. Esta crisis económica es una que se ha ido acumulando a través de los años y ha explotado en el peor momento. Tampoco hay que ser economista para entender que no es algo que se podrá superar en dos o tres meses.
La solución que ha ofrecido el Gobernador es obtener un préstamo que permitiría poder mantener abiertas las agencias y las escuelas. Para obtener el préstamo necesita el visto bueno del Senado y la Cámara. Ya obtuvo el visto bueno del Senado pero en la Cámara la actitud es uno de rechazar la propuesta por motivos politiqueros. Ellos buscan provocar la crisis y la inestabilidad para desprestigiar al gobierno actual. No piensan en el bienestar del pueblo, solo les importa su quiosco y sus agendas políticas.
Quedarse callado en este momento es ser cómplice de esta partida de irresponsables y vividores del pueblo. Lo más importante en estos momentos es la tranquilidad y la estabilidad económica de este país. A corto plazo eso se logra con el préstamo que nos mantendrá a flote por unos meses, después pueden considerarse otras propuestas creativas.
Hay que darle un mensaje claro a nuestros legisladores: !Basta ya de jugar con nuestras habichuelas! !Basta ya de despilfarrar el dinero en actividades superfluas y lujos! Para comunicarse con sus legisladores puede consultar esta lista.
Actualización: El Nuevo Día: Los legisladores del Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Cámara de Representantes están furibundos por los múltiples mensajes en sus correos electrónicos y las llamadas a sus celulares en reclamo de que aprueben las medidas fiscales presentadas por el Gobernador. Sigan llamando y expresen su sentir.
Editorial de El Nuevo Día Hora de asumir responsabilidades:
Si de fijar responsabilidades se trata está claro que han sido Pedro Rosselló y su marioneta política, el presidente de la Cámara, José Aponte, quienes han tenido en todo momento la posibilidad de evitar esta crisis.
La estrategia es tan clara como mezquina: provocar un estado de inestabilidad que dure hasta las elecciones. Con ese solo propósito político Rosselló está dispuesto a secuestrar el bienestar económico de los puertorriqueños.
Lo que ha hecho Rosselló es un acto de sabotaje y chantaje político digno de un país tercermundista donde no existe la democracia. Por ambición personal y por un capricho político está dispuesto a llevar a Puerto Rico a la quiebra.
Por otro lado, el gobernador Aníbal Acevedo Vilá debió haberse movido mucho más rápidamente para reducir los costos del Gobierno. Desde junio pasado Acevedo Vilá sabía por vía del secretario de Educación, Rafael Aragunde, que el Departamento de Educación enfrentaría una deficiencia presupuestaria.
Desde que asumió la gobernación, Acevedo Vilá ha hecho poco para reducir los costos del Gobierno central. Ha sido escaso el progreso que el Gobernador ha logrado en el congelamiento de plazas.
3 comentarios
Mario:
Es agobiante. Y pensar que el país entero (menos varios legisladores) se siente igual o peor. En la Universidad aún la cosa no está tan mal pero ya se siente la presión. Pero ¿te imaginas las parejas donde ambos trabajan para el gobierno? ¿Donde ambos dejarán de recibir dinero para sustentar a sus familias desde el próximo lunes? ¿Cómo se sienten ellos?
Tienes mucha razón al decir que es difícil bloguear en tiempos como estos. Hemos vivido como si fuéramos un país del primer mundo por demasiado tiempo. Bienvenidos al tercero.
Lamentablemente la estabilidad emocional y psicológica del país está en detrimento, hoy por hoy Puerto Rico no será el mismo. Aunque la situación fiscal y económica del país se estabilice, los actos vandálicos, la criminalidad desenfrenada, la evasión contributiva, y otros problemas sociales seguirán aumentando hasta crear un aire de violencia insostenible. Estoy afligida ante la situación actual no en balde tengo la responsabilidad social de apoyar los movimientos, apoyar a mis familiares y amigos y por ende apoyar a mi patria independientemente de quien gobierne, de quien sea el obstáculo o el vehículo. Soy parte del problema y soy parte de la solución. Motivo a todos mis compatriotas ha lanzar un grito en pro del bienestar social de Puerto Rico, por lo económico, por lo social pero principalmente por la paz espiritual de un pueblo que sufre ante la incertidumbre de una sana convivencia.
Sinceramente, Sr. Núñez, no conozco la realidad de vuestro país. Alcanzo humildemente a realizar algunos análisis sobre lo que ocurre en Argentina, país en el que la mayoría, a pesar del extraño clima social en que se vive, todavía pareciera existir un hálito de esperanza. Puedo afirmar sin embargo que cada vez más existen millones de excluidos de los cuales nadie habla. El estándar de «sobrevida» de quienes vivimos en Buenos Aires ocupa los pliegos de todos los medios de comunicación pero algo es claro: los porteños estamos enfermos de alienación y aislamiento. La pobreza en la falta de ejercicio de solidaridad, participación y carencia en el reparo de la existencia del otro reina en toda la ciudad.
Las depresiones abundan solapadas tras la exigencia cotidiana del trabajo tercerizado. Las «locuras» están a la orden del día. Diría que «la procesión va por dentro» acompañada de muchísima angustia y ansiedad por el consumo de banalidades.
Como ud. dice, «No es fácil bloguear en tiempos de crisis social.» Pero su espacio merece seguir existiendo con todos sus contenidos y en mi opinión, este tipo de post, humanizan más a los blogs.
Ánimos que seguramente ud. tiene mucho más que ofrecer.
Saludos.