La ciencia y el campo akásico

La Ciencia y el Campo Akásico es un libro que amerita ser examinado por todos aquellos que estén interesados en modelos alternos para entender la vida. Escrito por Ervin Laszlo, uno de los grandes pensadores de nuestro tiempo, este libro nos acerca a un nuevo paradigma que sin lugar a dudas tiene el potencial de transformar los modelos que hemos utilizado para entender la realidad. La tesis del libro gira en torno a la siguiente pregunta: ¿Qué pasaría si todo lo que alguna vez ha ocurrido en el mundo estuviera registrado en algún banco de información ultra-dimensional?

Akásico viene de Akasha (ã kã/sha) , la cual es una palabra en sánscrito que significa «éter». En la filosofía hindú Akasha era considerado el primero y el más fundamental de los elementos . El llamado registro akásico es el archivo permanente de todo lo que ocurre y de lo que ha ocurrido en el espacio y en el tiempo. De acuerdo a Laszlo existe evidencia de la existencia de este tipo de registro y él lo llama el campo A:

El campo de punto cero del vacío cuántico no es sólo un campo energético superdenso, sino que es también un campo informativo super rico, la memoria holográfica del universo. Este descubrimiento recuerda al concepto de la filosofía hindú de la Crónica Akásica, el registro de todo lo que ocurre en el mundo que permanece trazado en el campo akásico. Tiene mucho sentido denominar al nuevo campo informativo del universo (re)descubierto el «campo A», a partir de la antigua tradición del campo akásico. El campo A ocupa su lugar entre los campos fundamentales del universo, uniéndose al campo G (el campo gravitatorio), el campo EM (el campo electromagnético) y los distintos campos nucleares y cuánticos.

En su libro Laszlo ,apoya con evidencia de la física cuántica y otras ciencias, los siguientes principios:

1. La información se extiende más allá de la mente de cada persona

2. El universo está constituido por una unión de campos continuos y fuerzas que llevan información a la vez que energía.

3. La realidad aparece como un campo cósmico de interconexión, que conserva y que transmite la información. Los efectos del campo akásico no se limitan al mundo físico: el «campo A» (como vamos a llamarle) informa a todas las cosas vivas, a todo el tejido de la vida.

4. Todo lo que hacemos , decimos o pensamos produce nueva información que está disponible en un campo de energía holográfico.

Estos principios sugieren un mundo en donde todo lo que existe está conectado y todo lo que se haga afecta a los demás directa o indirectamente. Pero mejor lo expresa Lazslo en el comienzo del libro con un poema:

Ven,
navega conmigo por un lago tranquilo.
Las orillas están veladas, la superficie está en calma. Somos naves en el lago y somos uno en el lago.
Vamos dejando una estela,
navegando por las aguas neblinosas. Su sutil ola señala nuestro paso.
Tu estela y la mía se funden, y forman un dibujo que refleja tu movimiento y el mío.
Según otras naves, que también somos nosotros,
navegan por el lago, que también es nosotros,
sus olas se cortan con las nuestras. La superficie del lago cobra vida ola sobre ola, estela sobre estela.
Son la memoria de nuestros movimientos,
las trazas de nuestra existencia.
Las aguas susurran, de ti hacia mí, de mí hacia ti,
y desde nosotros hacia todos los que navegan en el lago:
Nuestra separación es sólo una ilusión; somos partes conectadas de un todo — somos un lago con movimiento y memoria. Nuestra realidad es más grande que tú y yo, y que todas las naves que surcan las aguas, y que todas las aguas en que navegamos.

Pero que tiene que ver todo esto con el tema de este blog. Tal vez nada o tal vez mucho. Es muy probable que una de las razones por las cuales se tiene un blog es para tratar de materializar y concretizar nuestro registro akásico. Escribimos para tener un registro de lo que hacemos, decimos o pensamos. Escribimos para añadir a la memoria colectiva de la web y de la vida. Escribimos con el propósito de estableces conexiones y dejar nuestra huella en el registro akásico.