Un cuento budista con múltiples significados:
Dos monjes están meditando en medio de la naturaleza;
a uno lo rodean muchos conejos,
al otro ninguno se le acerca.
Este último pregunta:
«Si nosotros dos meditamos con igual intensidad
el mismo número de horas cada día,
¿por qué a ti te rodean los conejos y a mí no?»
«Muy simple», responde el otro:
«Porque yo no como conejo y tú sí».
1 comentario
Maestro:
En Piletas, habian conejos?