La culpa del accidente del Columbia no la tiene el PowerPoint pero si la manera en que se está abusando de este programa por encima de los llamados informes técnicos. Todo se quiere resumir en «bullets»y en casos de vida o muerte hace más falta más que 40 slides que intentar resumir informes de cientos de páginas. La moraleja del asunto es que cuando se trate de asuntos de vida o muerte no podemos basar nuestra decisión en una presentación de PP o en cualquier tipo de programa en donde se utlice el mismo estilo cognitivo.
Otros artículos que hemos publicado sobre este tema en ATA:
The cognitive style of PowerPoint
Referencias:
1 comentario
Mario:
Volvemos a otra confrontación sobre Pepe (Power Point) que me parece que la prensa ha exagerado. Al tu proveer el informe técnico se aclaran algunas cosas.
1. Una sola diapositiva, al parecer, fue el objeto del análisis en un recuadro de la página 191.
2. Esa diapositiva tenía errores de uso de palabras (sus significados), errores de datos técnicos, problemas topográficos debidos a baja resolución y la manera en la que se estructuraron las oraciones, inconsistencia en los datos, y peor aun, errores cuantitativos sobre los residuos (debris) y su impacto.
3. La presentación fue preparada por el contratista, Boeing, y presentada por el Equipo de Evaluación de Residuos de la NASA, quienes no pasaron trabajo en el análisis de los datos, ni en lo que decían las diapositivas.
4. En las recomendaciones del informe no aparece nada sobre el uso de Power Point. ¡A Dios gracias!
El abuso de Pepe es otra cosa, NASA, a diferencia de otras agencias, depende de eso y de informes técnicos sin evaluación de pares para sus reuniones y discusiones. Otras agencias tienen otros protocolos.
Vivimos en una era de un flujo enorme de información, donde la presentación es importante estéticamente, donde la forma es un auxiliar vital, pero donde la calidad de la información y su síntesis son fundamentales. ¿Acaso no son los blogs eso? Por cierto, la diapositiva (una) en cuestión era una absoluta porquería y no tenía nada de arreglos ni estética. Ninguna clase nuestra es una conferencia magistral donde todo está dicho y expresado. Un Pepe de vez en cuando ayuda a sintetizar y avanzar en la discusión. Yo en clase, los combino.
Nada, siempre con el lado luminoso de Pepe.